La semana pasada salieron a la calle en Bruselas para hacerse oÃr y ahora, en una rueda de prensa virtual organizada por la Coordinadora Europea VÃa Campesina (ECVC), de la cual COAG)forma parte, los productores han subrayado las necesidades de la agricultura familiar, que constituyen el 95% de los 10,5 millones de explotaciones agrÃcolas de la Unión Europea (UE).
En particular, según un comunicado, han abogado por el aumento del apoyo a los medianos y pequeños agricultores europeos a través de la regulación del mercado y de unos precios justos, en lugar de “estar a merced del mercadoâ€.
Attila Szocs, del comité coordinador de ECVC, ha indicado que sin una regulación pública del mercado, “los grandes actores de la industria y distribución seguirán presionando a los agricultores para que produzcan y vendan a precios cada vez más baratosâ€.
Eso, ha añadido, conduce a la destrucción de la agricultura a pequeña y mediana escala, más social y sostenible, asà como a la pérdida de la biodiversidad y la despoblación del medio rural.
CRÃTICA A LA AGRICULTURA INDUSTRIAL
La agricultura industrial, según critica esta organización, está basada en un uso mayor de pesticidas, la explotación de los recursos naturales y los animales y la violación de los derechos de los trabajadores.
Además, los defensores de los intereses de los pequeños agricultores europeos abogaron por la necesidad de aplicar la llamada “condicionalidad social†dentro de la PAC, es decir, condicionar la recepción de fondos agrÃcolas al respeto de los derechos laborales.
Se han mostrado también preocupados por el medio ambiente y han opinado que, si no se introducen cambios, los ecoesquemas no van a garantizar por sà mismos una producción agrÃcola respetuosa con el medio ambiente.
El 28 y 29 de junio próximos tendrá lugar una nueva reunión de los ministros de Agricultura de la UE con el objetivo de tratar de cerrar un acuerdo sobre la PAC que regulará el campo entre 2023 y 2027, tras el frustrado intento de mayo.