FEV y PTV, juntos por la tecnología

Madrid ha sido testigo una vez más del espíritu colaborativo que define al sector vitivinícola español, gracias a la renovación del acuerdo de colaboración entre la Federación Española del Vino (FEV) y la Plataforma Tecnológica del Vino (PTV). Este pacto, que se mantiene firme desde 2018, se erige como un pilar fundamental en la búsqueda constante por la innovación, el desarrollo experimental y la vanguardia tecnológica en el ámbito del vino.

Esta colaboración estratégica tiene un claro objetivo: potenciar la investigación, el desarrollo y la innovación dentro del sector vitivinícola español. Ambas entidades, conscientes de la importancia de mantenerse a la vanguardia, se comprometen a dinamizar la innovación industrial. Esto no solo favorecerá la competitividad del vino español en el mercado global, sino que también facilitará su internacionalización. En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, mantenerse actualizado no es una opción, sino una necesidad para cualquier sector que aspire a destacar en el mercado internacional.

Uno de los aspectos más destacables de este acuerdo es la cooperación entre el Hub de Digitalización y Vino de la FEV y el área de Digitalización de la PTV. La sinergia entre estas dos áreas es fundamental para impulsar proyectos estratégicos que no solo buscan la transformación digital del sector, sino que también pretenden establecer un modelo de negocio más eficiente y adaptado a los nuevos tiempos. La digitalización no es solo una herramienta de modernización; es también una forma de acercar el vino a nuevas generaciones de consumidores, de abrir nuevos canales de comercialización y de optimizar los procesos productivos.

En el ámbito internacional, la designación de Mario de la Fuente, gerente de la PTV, como representante de la FEV en la presidencia del grupo de R&D del Comité Européen des Entreprises Vins (CEEV) es un reflejo del compromiso español con la innovación vitivinícola a nivel global. Esta posición no solo permite a España tener una voz protagonista en la definición de las líneas estratégicas de investigación e innovación en Europa, sino que también facilita la creación de alianzas internacionales y el intercambio de conocimientos y tecnologías.

La renovación de este acuerdo es una muestra clara de que, en el sector vitivinícola español, la tradición y la modernidad no solo pueden coexistir, sino que deben hacerlo para asegurar el futuro de una de las industrias más emblemáticas del país. La apuesta por la I+D+i es una declaración de intenciones, una forma de decir al mundo que España no solo valora su rica herencia vinícola, sino que también está preparada para liderar el camino hacia la innovación y la sostenibilidad.

Este espíritu de colaboración y búsqueda constante de mejora es lo que permite al vino español no solo mantener su relevancia en un mercado cada vez más competitivo, sino también adaptarse a los desafíos del futuro. La FEV y la PTV, con su trabajo mancomunado, están sentando las bases para un sector vitivinícola más fuerte, sostenible y, sobre todo, preparado para los retos que depara el futuro.